martes, 19 de julio de 2016

LLANURA AMAZÓNICA

La llanura del amazonas es la forma de relieve asociada a la cuenca del río Amazonas, se encuentra al norte de Brasil, abarcando también territorios del norte de Bolivia, este de Perú y ecuador, así como el Sur de Colombia y Venezuela. Al norte limita con el macizo guayánico, al sur con la meseta brasileña y al oeste con la cordillera de los Andes desembocando hacia el este en el océano Atlántico. Esta llanura está hecha por sedimentos de origen marino y luego continental provenientes de los dos Macizos y de la Cordillera de los Andes. Transportados fundamentalmente por los ríos.
En este espacio se desarrolla la selva tropical más grande del mundo: la selva Amazónica. La temperatura promedio es de 26ºc. Las precipitaciones se encuentran por encima de los 3.800mm. anuales la llanura se vuelve más húmeda hacia el oeste con un promedio de 90%. Este régimen pluviométrico es producto de las lluvias convectivas diarias, hacia el sur las precipitaciones disminuyen a 2.400mm anuales.
Características de los suelos tropicales.

Los suelos tropicales son sistemas muy húmedos, y por ende tienen una cobertura vegetal total por lo que son ricos en materiales orgánicos y prima la infiltración del agua sobre el escurrimiento, ambas cosas favorecen la meteorización química tanto por hidrólisis como por neoformación. La alta infiltración y escaso escurrimiento hacen que la erosión de las laderas sea muy lenta, que la erosión, que la ablación torrencial sean nulas y también que las napas hipodérmicas y freáticas tengan importantes reservas de agua manteniendo constante el caudal de los ríos. Esta situación sumada a la alta competencia de aguas fluviales pobres en sedimentos hace que los cursos de agua estén entallados en el fondo del lecho.
Los suelos tropicales de la selva amazónica en su estado natural están en bioestacia.
La bioestacia es la estabilidad geológica donde predomina la alteración química de los suelos por acumulaciones calcáreas.
Por el contrario, la rhexistacia son períodos de inestabilidad geológica donde dominan los procesos erosivos y las acumulaciones de sedimentos detríticos.
Para que se dé un proceso de desertificación en los suelos tropicales amazónicos tiene que haber zonas sin cubierta vegetal, el golpeteo de las lluvias impermeabiliza la superficie y comienzan los procesos erosivos típicos de las zonas áridas al mismo tiempo que se comienza a producir un desbalance hidrico por predominio de la evaporación en esta zona sin cobertura vegetal, lo que ocasiona un gran aumento del escurrimiento superficial y el desborde de los ríos que empiezan a erosionar sus cauces y a transportar sedimentos, por lo tanto se convierte en un proceso de rhexistacia.
La vegetación y la tala de la selva
 La selva amazónica tiene una vegetación de selva estratificada en cuatro pisos:
  1. Fluctúa entre los 50 y 60mts. de altura
  2. Entre 50 y 40mts.
  3. Entre 20 y 40mts.
  4. Árboles y arbustos bajos hasta 20mts
ESTA VEGETACIÓN ESTA SIENDO TALADA INDISCRIMINADAMENTE PARA LA EXPLOTACIÓN DE MADERAS DURAS Y LAS PRÁCTICAS AGRICOLAS.
En la Amazonía se evidencia un proceso de degradación ambiental creciente reflejado en el avance de la deforestación, la pérdida de biodiversidad y los impactos localizados del cambio climático que producen un proceso de rhexistacia creciente.
El cambio de uso del suelo amazónico debido al crecimiento de actividades económicas, la construcción de infraestructura y el establecimiento de asentamientos humanos, ha generado una acelerada transformación del ecosistema amazónico. Para el 2005 la deforestación acumulada en la Amazonía alcanzaba los 857.666 km2 lo que significa que la cobertura vegetal de la región se ha reducido en aproximadamente 17 por ciento. Esto equivale a las dos terceras partes de la superficie del territorio peruano.
El cambio climático y los eventos extremos están generando presiones sobre el ecosistema amazónico, aumentando su vulnerabilidad. La región se ha visto afectada por la elevación de la temperatura promedio, aunque en diversa magnitud dependiendo de la zona, mientras que el nivel de precipitaciones se está modificando, aunque las tendencias a ese respecto son aún poco claras.


El informe GEO Amazonía sostiene que la propia deforestación en la zona puede afectar el clima regional. Si la pérdida de bosque excede el 30% de la cobertura vegetal, la inhibición de las lluvias se volverá más fuerte, lo cual generará un círculo vicioso que favorece la quema de bosque, reduce la liberación de vapor de agua y aumenta las emisiones de humo a la atmósfera, con la consecuente reducción de precipitaciones. Debido a esta deforestación, la Amazonía está configurándose progresivamente en una importante contribuyente a la emisión de gases de efecto invernadero.
Brasil presenta la mayor área deforestada acumulada, 682.124 km², lo que significa que del total deforestado en el período 2000- 2005, 79,5% corresponde a este país, seguido de Perú con 8,2% de la deforestación total del período, y de Bolivia y Colombia con 5,3 y 3,4%, respectivamente.
Los demás países participan con porcentajes por debajo del 2% del total. Cabe precisar que las interpretaciones presentadas deben ser entendidas como preliminares, debido a que los datos no son homogéneos para todos los países durante el período de análisis.
La publicación recoge los resultados del estudio Nepstad (2007) que proyecta que para 2030 el bosque húmedo amazónico podría estar desforestado en un 55 por ciento, cuyas consecuencias podrían convertir a gran parte de la Amazonía en una sabana antes que concluya el siglo XXI.
ACTIVIDAD 1: realiza un esquema con las características de los suelos tropicales
ACTIVIDAD 2: piensa cuales pueden ser las consecuencias ambientales en el futuro si se continúa la tala de la selva
ACTIVIDAD 3: usa internet para averiguar quien fué "Chico Mendes"