BRASIL

Brasil está localizado en el hemisferio occidental, entre los meridianos de 34º47’30” y 73º59’32” al oeste de Greenwich y entre los paralelos 5º16’20” de latitud norte y 33º44’42” de latitud sur; es cortado en el norte por la línea ecuatorial y, en el sur, por el trópico de Capricornio; un 90 por ciento de su territorio está en el hemisferio sur. Brasil es el único país luso-parlante de las Américas.

Brasil está en la porción centro-oriental de América del Sur y tiene fronteras con nueve países: Uruguay, Argentina, Paraguay, Bolivia, Perú, Colombia, Venezuela, Guyana y Surinam, y con el departamento francés de Guyana; no tiene fronteras con Ecuador y Chile.

       Sus dimensiones lo caracterizan como un país continental, ocupando su territorio el 1,6 por ciento de la superficie del globo terráqueo, con 5,7 por ciento de la tierra del planeta y 20,8 por ciento de la superficie del continente americano, así como el 12.7 por ciento del agua dulce del mundo (5 190 km3).

El área territorial brasileña es de 8 547 403,5 km2 y su perímetro abarca 23 086 km, siendo limitado por más de 7 367 km por el océano Atlántico, el 31,9 por ciento de sus fronteras. Es el tercer país más grande en área y en más grande de América del Sur ocupando el 66 por ciento del área territorial. Esta área comprende tierra arable (5%), cultivos permanentes (1%), pasturas permanentes (22%), selvas y bosques (58%) y otros (14%)

      El relieve de Brasil está dividido en dos grandes áreas de meseta y en tres áreas de planicies:

      Meseta de Guyana, abarcando el área montañosa y la meseta norte de la Amazonia, en el extremo norte del país, es una parte integral del escudo de Guyana, presentando rocas cristalinas precámbricas. Esta área incluye el punto más alto de Brasil, el Pico da Neblina, de 3 014 msnm.

      Meseta brasileña, subdividida en central, Maranhão-Piauí, noreste de Brasil, montañas y meseta del este y sudeste, del sur y Uruguaya-Riograndense, formada por rocas cristalinas bastante meteorizadas y cuencas sedimentarias. Está localizada en la parte central del país, y abarca grandes áreas del territorio nacional.

      Planicies y tierras bajas de la Amazonia, en el norte del país, debajo de la meseta de Guyana, presenta tres niveles altimétricos diferentes: valles, constituidos por tierras de reciente formación cerca de los márgenes de los ríos; terrazas fluviales, con altitudes máximas de 30 msnm y periódicamente inundadas, y mesetas bajas, formadas por tierras de la era terciaria.

      Planicie del Pantanal, en el oeste del estado de Mato Grosso do Sul y sudoeste del estado de Mato Grosso, está formado por tierras de la era cuaternaria.

      Planicies y tierras bajas costeras, a lo largo de la costa, desde Maranhão hasta el sur del país, están formadas por tierras de la era terciaria y por tierras actuales de la cuaternaria.

      El clima en un área determinada está condicionado por varios factores, entre ellos temperatura, lluvia, humedad atmosférica, vientos, presión atmosférica, los cuales a su vez son condicionados por factores como altitud, latitud, características del relieve, vegetación y continentalidad.

      Brasil, debido a sus dimensiones continentales, posee una diversidad climática muy amplia, influenciada por su configuración geográfica, su importante extensión costera, su relieve y la dinámica de las masas de aire sobre su territorio. Este último factor asume gran importancia, debido a que actúa directamente sobre las temperaturas y los índices pluviométricos en las diferentes áreas del país.

      Las masas de aire, especialmente aquellas que ocurren más directamente en Brasil son, de acuerdo con el Anuario Estadístico de Brasil (IBGE): la masa de aire Ecuatorial, dividida en Ecuatorial, Continental y Ecuatorial Atlántica; la masa de aire Tropical, también dividida en Tropical Continental y Tropical Atlántica; y la masa de aire Polar Atlántica. Todas estas masas de aire contribuyen a la diferenciación climática de Brasil (Figura 4).

      De este modo, los climas varían desde muy húmedo y caliente, proveniente de las masas de aire Ecuatorial como es el caso de gran parte del área amazónica, hasta los climas semiáridos muy fuertes, como aquellos del interior del nordeste de Brasil. 

  Estado de Amazonas

Enclavado en el corazón de la más densa selva del mundo, el estado de Amazonas tiene una extensión superior a 1,5 millones de km2, lo que equivale al 18% de la superficie de Brasil (8,5 millones de km2). Es el mayor estado brasileño, posee una de las mayores diversidades del mundo de plantas, animales, cursos de ríos y minerales.

El nombre de Amazonas le fue dado originalmente al río que baña el estado, por el capitán español Francisco de Orellana. El navegante lo recorrió en 1541. En cierta ocasión, se encontró con una tribu de indias guerreras, con las cuales luchó, asociándolas a las mitológicas guerreras amazonas, por ese motivo les dio el mismo nombre. En lengua indígena, amazonas viene de la palabra amassunu, que significa "ruido de aguas", o "agua que retumba". En el norte del estado se encuentra el punto más alto del territorio brasileño, el Pico da Neblina, con 3.014 metros de altitud. Situado en la Sierra de Imeri, cerca de Venezuela, se mantiene permanentemente cubierto de bruma. La línea del ecuador cruza el estado, lo que hace que predomine el clima ecuatorial, caracterizado por temperaturas medias entre 24° y 26° C y lluvias abundantes durante todo el año.

En la cuenca amazónica se concentra la mitad de los veinte mayores ríos del mundo que representa una quinta parte de toda la reserva de agua dulce del planeta. Sus ríos, condicionados al régimen de lluvias, constituyen prácticamente las únicas vías de transporte de la zona. Hay más de 20.000 kms. de vías fluviales navegables.

El río Amazonas es el más extenso del planeta y el primero en volumen de agua (100.000 m3). Nace en Perú, con el nombre de Vilcanota, Solimões cuando entra en Brasil y, al confluir con el río Negro, en las proximidades de Manaus, recibe el nombre de Amazonas. En algunos tramos tiene una anchura de 10 kms. y una profundidad de 100 m.

Entre las múltiples áreas protegidas del estado de Amazonas, están el Parque Nacional do Pico da Neblina y el Parque Ecológico de Janauary. Éste posee vegetación de tierra firme, de igapós y la vegetación típica. El parque de Janauary está administrado por un consorcio turístico, formado por empresas del sector mediante concesión del gobierno del estado. En Amazonas se encuentra también el Parque Nacional de Jaú, la mayor reserva forestal del continente y área próxima a Anavilhanas, el mayor archipiélago fluvial del mundo.

 Manaus, en los primeros años del siglo XX, la ciudad de Manaus, capital del Amazonas gozó de una gran opulencia y fue el más importante centro cultural del Norte de Brasil. Los antiguos señores del caucho soñaban en transformarla en una ciudad de estilo europeo y la denominaron "Paris de los Trópicos". La arquitectura de sus mansiones confirma el lujo y la ostentación en que vivían sus habitantes.

ESTADO DE PARÁ

Es el segundo estado brasileño en superficie después de Amazonas, la longitud de su costa es de más de 560 kms.

En la época del descubrimiento, Pará era denominado por los portugueses Feliz Lusitânia. Desde principios del siglo XVI fue diversas veces invadido por los holandeses y los ingleses que, además de ocupar el territorio, buscaban especies de pimienta, guaraná, árbol del cual se produce un polvo utilizado como estimulante, y semillas de urucum, fruto utilizado en la cocina y como protector solar, del cual se extraen además tintes. La ocupación portuguesa tan sólo comenzó en 1616, con la fundación del Forte do Presépio, hoy denominado Forte do Castelo, en la bahía de Guajará, que dio origen a la ciudad de Belém.

En su casi totalidad, Pará está situado en la Selva Amazónica, excepto por las partes donde existen formaciones de campos, en la región del bajo río Trombetas y archipiélago de Marajó.
Un suelo rico en minerales le definen como uno de los estados más ricos de Brasil, además por su importante cuenca hidrográfica circulan gran cantidad de mercancías y personas, siendo el medio de transporte más utilizado. Pará tiene una economía basada también en la extracción vegetal, en la agricultura y la ganadería. En la agricultura, los principales productos son la naranja, la caña de azúcar, el maíz, la pimienta negra, la mandioca y el cacao.

La población indígena del estado, según estimaciones del Instituto Brasileiro de Geografía e Estadística (IBGE) es de 15.450 habitantes y formada por 39 grupos indígenas. Entre las mayores comunidades se encuentran los Andira Marau, los Mundurukus y los Kayapós.  

Belém, capital del Estado de Pará está repleta de recortes y concavidades que forman pequeñas islas a su alrededor. Son 55 en total, la mayoría de ellas salvajes y deshabitadas, al lado de otras en las que se concentran pequeños núcleos de población. Entre ellas están las islas de Mosqueiro - rodeada de 14 playas de aguas dulce - y Caratateua que reciben durante la temporada de verano gran número de visitantes. Además de éstas, Belém tiene a su alrededor la isla de Tatuoca, donde se encuentra la única estación geodésica de América Latina, una de las 7 existentes en el mundo.

Situada a orillas de la Bahía de Guajará, en el estuario de los ríos Tocantins y Pará, la ciudad fue fundada como puerto fluvial en 1616. Conocida como "Cidade das Mangueiras" por el gran número de árboles de mango que existen allí.

Estado de Tocantins

Creado por la Constitución de 1988, con el desmembramiento del área norte del estado de Goiás el estado de Tocantins está situado en una zona de transición entre la Floresta Amazónica y el Cerrado mezclando la fauna y la flora de estos dos sistemas ecológicos. Cortado de norte a sur por dos largos ríos, el Tocantins y el Araguaia, presenta una sucesión de playas fluviales y gran riqueza natural, con tierras adecuadas para la agricultura y la ganadería.

En Tocantins penetraron los misioneros jesuitas que, en 1625, fundaron al norte del Goiás antiguo una misión, Tocantins siempre se diferenció de las demás del estado al cual pertenecía. La dificultad de acceso y penetración en el área donde está hoy situado llevó a una mayor población y consecuente desarrollo del sur y sureste, sedimentando las diferencias regionales y fortaleciendo los ideales separatistas. Las primeras manifestaciones de autonomía comenzaron en 1809, como reacción a los cobros de elevados tributos en la minería, y, aún en el siglo XVIII, a ellas siguieron varios intentos de separación que fracasaron en su totalidad. A partir de la década de 70, el movimiento se hizo más fuerte, para finalmente con la creación del estado de Tocantins ratificado por la Constitución en 1988 fue determinante para finalizar cualquier tipo de disputa con el gobierno central.

Palmas, la capital del estado de Tocantins, es todavía un lugar en obras. Considerada la más nueva ciudad de Brasil, se la denomina la "Capital de las Oportunidades" y ha atraído a miles de personas que, en busca de trabajo, emigran hacia la nueva frontera económica del país. En este clima de crecimiento el turismo surge como uno de los segmentos a explotar. Con bellezas naturales todavía intactas, kms. de playas fluviales, cascadas y reservas ecológicas. La capital está situada en el centro geográfico de Tocantins e integra la Región Turística de Palmas, junto con otros cuatro municipios - Lajeado, Miracema do Tocantins, Monte do Carmo y Porto Nacional.

Estado de Rondonia

Eslabón entre la Amazonia y el Centro-Oeste brasileño, Rondônia comenzó a desarrollar su potencial económico y turístico, principalmente a partir de 1982, año en que dejó de ser territorio para convertirse en estado, y comenzaron a potenciarse el sector agropecuario y la producción del café.
Rondônia comparte un fuerte potencial turístico. Sus bosques, ríos, cascadas, y su cocina a base de pescado, son algunos de los atractivos. Con 1.700 kms. de extensión, el río Madeira es el mayor afluente de la margen derecha del ríoAmazonas, también bordea Porto Velho. Pasear por sus aguas significa navegar en medio de la Selva Amazónica, observando árboles centenarios, aves exóticas y tramos de rápidos. Por el río Madeira se llega también al Lago do Cuniã, a 120 kms. de la capital, una reserva biológica con vivero natural de peces de agua dulce, sobrevolada frecuentemente por bandadas de pájaros.

Porto Velho, capital del actual estado.

Estado de Acre

El estado de Acre, conocido como tierra de caucho y tierra de Chico Mendes, líder ecologista que defendió la floresta Amazónica y que nació en Xapuri pequeña ciudad de la Amazonia brasileña próxima a la frontera con Bolivia y actual lugar de encuentro de ecologistas y practicantes del ecoturismo. Acre ha conseguido el titulo de: “Tierra del Turismo Verde”, ya que tiene  el 95% de su superficie territorial, más de 153.000 km2, cubierta por la Selva Amazónica, con una gran variedad de fauna y flora.

La puerta de entrada en este "paseo verde" es la capital del estado: Río Branco, que vivió su esplendor durante la época dorada del caucho, extraído de los árboles que ocupaban totalmente la zona donde hoy se encuentra situada esta ciudad. Del itinerario forman parte, entre otros, el municipio de Plácido de Castro y el Vale do Juruá.

Rio Branco es la capital del Estado de Acre, recibió su nombre en homenaje a José Maria da Silva Paranhos, el Barão do Rio Branco, que, con su diplomacia, consiguió resolver la disputa por el territorio entre Brasil y Bolivia, lo anexionó a Brasil en 1903, cuando era Ministro de Asuntos Exteriores. Está cortada por el río Acre y ostenta el titulo de "Capital de la Naturaleza", es la puerta de entrada para recorrer los caminos del turismo verde, está rodeada de seringais y castaños. Zona protegida de las grandes depredaciones y la contaminación, Rio Branco es una ciudad muy peculiar, no sólo por la mezcla de su población, creencias y costumbres, sino también por su arquitectura, lo moderno y lo antiguo se encuentran en las plazas, museos, palacios y parques. 

La región Noreste incluye los estados de Alagoas, Bahia, Ceará, Maranhão, Paraiba,  Pernambuco, Piauí, Río Grande do Norte y Sergipe, ocupa una extensión aproximada de 1.561.000 km2, que corresponde a más del 18 % de la superficie total del país. La mayor parte de su territorio está formada por una extensa meseta y allanada por la erosión.

Su población es de más de 46.000.000 de habitantes, lo que representa un 29 % del total del país. La expectativa de vida en esta región es la menor del país: 64 años. Su densidad demográfica es de 29 habitantes por km2 y la mayor parte de la población se concentra en la zona urbana (61 %). Las principales metrópolis regionales son las ciudades de Salvador, capital del Estado de Bahía; Recife, capital del Estado de Pernambuco, y Fortaleza, capital del Estado de Ceará.

PIAUI

En la mayor parte del Estado predomina el clima semiárido, con períodos lluviosos (de diciembre a abril) y de sequía (los demás meses). La vegetación es de caatinga, lo que, unido al clima, favorece una agricultura de subsistencia, la cría extensiva de ganado en grandes latifundios y el extracción de diferentes especies de palmera como la carnaúba y el babaçu son los recursos más importantes.

Piauí cuenta con la ventaja de tener la población estabilizada, equilibrada entre las áreas rural y urbana, y una densidad demográfica baja para los niveles de la región Nordeste.

La capital, Teresina, es la única entre las capitales de estados nordestinos no situada a orilla del  mar, por haberse producido la colonización del Estado de forma diferente de las demás unidades administrativas que componen la región Nordeste: en Piauí la ocupación se produjo desde el interior hacia el litoral, característica en la actuación de los bandeirantes.
Fue la primera ciudad planificada de Brasil, en 1852, diseñada por un maestro de obras, que la idealizó en forma de un tablero de ajedrez. En las desembocaduras de los ríos Paranaíba y Poti, se la conoce como la ciudad verde, porque todas sus calles y avenidas tienen árboles, principalmente mangos.

Estos dos ríos proporcionan a la ciudad playas fluviales, muy frecuentadas en la época de sequía, período que va de mayo a noviembre, cuando las aguas disminuyen y forman lagunas rodeadas por bancos de arena.

Estado de Pernambuco

Fue el escenario de sangrientas luchas contra los holandeses que ocuparon la región durante más de dos décadas, Pernambuco es uno de los estados brasileños donde se produjeron algunas de las escenas más épicas de la historia de Brasil. El estado conserva huellas del período en que se enriqueció gracias a la producción de caña de azúcar y su capital, Recife, encarna una perfecta síntesis entre lo nuevo y lo antiguo. El pasado colonial se mezcla en sus calles y monumentos con la modernidad de una metrópoli.

Pernambuco se formó absorbiendo una gama de tradiciones oriundas del negro, del indio y del europeo, que se mezclaron dando origen a la cultura local. La civilización del azúcar, la casa grande y la senzala, la naturaleza privilegiada, la conquista de las tierras áridas del sertão, todo eso contribuyó a un rico crisol cultural, presente en la literatura, la música, las artes plásticas, la artesanía popular, las danzas, las creencias y los condimentos de la cocina local. Estas tradiciones se conservan y las fiestas religiosas atraen a multitudes. Las mayores expresiones del folclore pernambucano son las danzas y los ritmos, como el maracatu (comparsa de carnaval), la cuadrilha, la ciranda y el fandango. Ninguna de ellas, sin embargo, tan asociada a Pernambuco como el frevo.

En los años 90, el trinomio constituido por la emergente actividad del turismo, la agricultura irrigada y el Complejo Portuario de Suape, proyecta todavía más la economía pernambucana en el conjunto nacional. El turismo tiene como principal polo de desarrollo: el proyecto Costa Dourada. Dicho programa, llevado a cabo por la iniciativa privada en colaboración con el gobierno federal y los de los estados de Pernambuco y Alagoas, tiene por objeto dotar de infraestructura al litoral en el tramo entre Cabo de Santo Agostinho (sur de Pernambuco) y Barra de Santo Antônio (norte de Alagoas), para explotar las potencialidades turísticas naturales de la región.

Recife, la capital del estado de Pernambuco nació en la hoz de los ríos Capibaribe y Beberibe, en 1548, como un poblado de pescadores, pero enseguida creció y se convirtió en la sede del gobierno en el período en que los holandeses ocuparon el Nordeste de Brasil. Se la conoce como la "Venecia brasileña" por sus puentes, canales y ríos; sólo en el centro de la ciudad existen 39 puentes que cruzan más de 50 canales. La capital pernambucana mezcla el pasado y el presente.

Estado de Bahia

Popularmente es un estado que ha recibido numerosos nombres, desde la “Tierra de la Alegría”, por la alegría y simpatía que transmiten las gentes que la habitan,  hasta la “Tierra de los Santos y de los Dioses”, ya que es considerado como el mayor centro de sincretismo religioso de Brasil. Salvador capital del estado, fue la primera capital del país.

Fue también en Bahia donde la mezcla de los portugueses que llegaban, de los indígenas que ocupaban sus tierras y, algún tiempo después, de los negros deportados de África como esclavos, provocó que se creara el primer embrión del mestizaje de la sociedad brasileña. Bahia fue la última capitanía que se adhirió a la independencia de Brasil, resistió dos años más fiel a Portugal.

El estado siempre ha tenido mucha relevancia en la vida de la nación y, a partir de la segunda mitad del siglo XX, se ha convertido en uno de los importantes polos de desarrollo económico y cultural de Brasil. Bahia a finales de los 60 fue testigo de la creación del más innovador movimiento cultural surgido en el país, a finales de los 60, con el lanzamiento de artistas como Caetano Veloso, Gilberto Gil y Gal Costa, cuatro músicos de la mayor importancia en el medio artístico nacional. También son de Bahia el compositor Dorival Caymmi y el gran intérprete de la bossa nova, João Gilberto, la cantante Maria Bethaia, Jorge Amado, el escritor brasileño más traducido en todo el mundo (en 60 países de los cinco continentes), más recientemente el gran compositor y cantante Carlinhos Brown.

 Bahia es la más perfecta síntesis de Brasil en términos artísticos, místicos y musicales. Ningún otro estado ha asimilado mejor la mezcla del elemento africano, indígena y lusitano en su cocina, en la cultura y en la religiosidad

Cuarto estado más poblado de Brasil, con más de 12 millones de habitantes, Bahia es el estado principal del Nordeste y su capital, Salvador, es la mayor ciudad de esa región. La economía bahiana ha experimentado profundas transformaciones en los últimos 30 años, con el crecimiento de la actividad industrial y la modernización de comercio y servicios.
A partir de los años 60, el turismo ha adquirido gran magnitud en el perfil de la economía bahiana.

Salvador de Bahia, capital de Bahia, fue fundada en 1549 sobre un colina que domina la Bahia de Todos os Santos, Salvador fue la primera capital de Brasil. La ciudad enseguida sirvió como puerto de apoyo a las rutas del Oriente y la de gran centro de exportación de azúcar. Estas dos actividades irían a contribuir a la conformación de una población mestiza de portugueses y esclavos africanos, importados en gran escala para el cultivo de la caña de azúcar. A éstos se sumaron otros contingentes étnicos, a partir de finales del siglo XIX, dando origen a una cultura popular muy rica, en la que se mezclan aspectos occidentales, africanos y, en menor escala, orientales. En 1763, por intereses de la Corona Portuguesa, perdió la capitalidad en beneficio de Rio de Janeiro.

Estado de Maranhao

Con un litoral salpicado de playas y un valioso patrimonio histórico, Maranhão es uno de los estados brasileños donde las marcas del pasado colonial e imperial del país son más fuertes.

La historia del asedio europeo a las tierras hasta aquel entonces habitadas por los indios Tupinambás puede conocerse paseando por la capital del estado Sao Luis, y por algunas otras pequeñas ciudades del estado, como Alcântara, declarada Patrimonio Histórico Nacional. Pero, además de estos atractivos arquitectónicos, entre sus bellezas naturales, Maranhão reserva algunas sorpresas, entre ellas se encuentran, por ejemplo, el Parque Nacional de Lençóis Maranhenses, el Delta del Río Paranaíba, la Región de Carolina y los Arrecifes del Parcel de Manoel Luís, el mayor banco de coral de América del Sur y un óptimo lugar para el buceo.

Con un litoral salpicado de playas y un valioso patrimonio histórico, Maranhão es uno de los estados brasileños donde las marcas del pasado colonial e imperial del país son más fuertes.

Conocido como “Tierra de las Palmeras”, Maranhão tiene en varias especies de estos árboles su principal fuente de riqueza. Entre las más significativas está el babaçu.

Al contrario de otros estados de la región Nordeste, Maranhão no sufre con la sequía. Existe en su territorio una extensa red de ríos perennes, además de una estación lluviosa regular. Forman parte de esta red el río Paranaíba, el mayor de ellos, y los ríos Gurupi, Grajaú y Tocantins, que discurre al sur y delimita la frontera de Maranhão con el estado de Tocantins.

São Luís, fundada en 1612, la capital de Maranhão, el más reciente bien considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En sus estrechas calles y sus casas grandes con fachadas de azulejos, reúne un conjunto arquitectónico con cerca de 3.000 edificaciones de los siglos XVII a XIX, que cuenta parte de la historia de la ocupación del territorio donde los franceses, en 1612, instalaron una colonia denominada Francia Equinoccial, derrotada tres años después por los portugueses, invadida en 1641 por los holandeses y una vez más recuperada por Portugal tres años después.

La ciudad vivió su apogeo en la segunda mitad del siglo XVIII, cuando las exportaciones de algodón estaban en su esplendor. En aquella época, la entonces provincia de Maranhão suministraba gran parte de los tributos al Tesoro Real, superando incluso a otras provincias que integraban el Imperio Portugués

Estado de Ceará

Con calor todo el año y una temperatura agradable por la noche, Ceará presenta un ecosistema diversificado, formado por regiones de caatinga (vegetación típica del Nordeste brasileño), bosque atlántico, cerrado y marismas. Junto al crecimiento industrial, el sector del turismo es el que más se ha desarrollado en el estado en las últimas décadas. Fortaleza recibe anualmente un promedio de medio millón de turistas, atraídos por los 576 kms. de litoral cearense, a lo largo de los cuales se extienden 87 playas y grandes extensiones de dunas, además de sus otros atractivos turísticos.

Fortaleza, es la capital de Ceará posee una de las más importantes y bien equipadas redes de hoteles y restaurantes del Nordeste. Es una ciudad de clima cálido y recepción calurosa a los visitantes, atraídos principalmente por la belleza de sus playas.

Formada por los Estados de Espírito Santo, Minas Gerais, Río de Janeiro y São Paulo, la región Sudeste ocupa el 10,85% del territorio brasileño, con una extensión de 927.287 km2. Se sitúa en la parte más elevada del Planalto Atlántico, donde están las sierras de Mantiqueira y del Mar do Espinhaço. Su paisaje típico presenta formaciones de montañas redondeadas, llamadas "mares de morros" y los "panes de azúcar", que son montañas de agujas graníticas.

El clima predominante en el litoral es el tropical atlántico y en las mesetas el tropical de altitud, con heladas ocasionales.
La selva tropical que existía originariamente en el litoral fue deforestada en el período de ocupación del territorio, dando lugar a plantaciones de café. En el Estado de Minas Gerais predomina la vegetación de cerrado, con arbustos y hierbas, y en el valle del Río São Francisco y en el norte del Estado se encuentra la caatinga.
La región Sudeste es la de mayor población, aloja a las dos más importantes metrópolis nacionales, las ciudades de São Paulo y Río de Janeiro, situadas en los Estados que llevan sus mismos nombres.
Su economía es la más desarrollada e industrializada entre las economías de las cinco regiones.

 Estado de Río de Janeiro

Capital del estado del mismo nombre, un estado exuberante y que cautiva por su belleza natural, enmarcada por una geografía privilegiada y por la manera de ser de sus habitantes, que concilian como pocos el arte de trabajar y vivir intensamente de un modo sencillo.
Durante casi dos siglos y medio, de 1716 a 1960, la ciudad de Rio de Janeiro fue la capital de la Colonia, del Imperio y de la República de Brasil. Con la transferencia de la capitalidad a Brasilia, en 1960, Río perdió su status político, pero no su encanto y su título de "ciudad maravillosa". Ha mantenido intacta su vocación de centro cultural y turístico y sigue siendo la principal puerta de entrada de extranjeros que vienen al país.

Rio de Janeiro, conocida mundialmente como “Ciudad Maravillosa”, esta  situada en un lugar privilegiado con bellezas naturales que van desde las playas que recortan sus costas, como las de Arpoador, Ipanema y Copacabana, hasta los montes que marcan su paisaje, como el Corcovado y el Pão de Açúcar. En Río está el mayor bosque urbano del mundo, el de Tijuca, totalmente reforestado en la segunda mitad del siglo XIX. La ciudad es además uno de los principales centros irradiadores de cultura nacional. A sus habitantes se les llama cariocas, cuenta con una animada vida nocturna, esa alegría se transmite en su fiesta principal, mundialmente conocida: el Carnaval, fiesta que mezcla a ricos, pobres y a todas las etnias. En Carnavales, se baila en los clubes y en las calles y, desde 1982 en el Sambódromo, el mayor desfile de escuelas de samba del mundo, pasarela proyectada por el arquitecto Oscar Niemeyer.

En la capital vive el 40% de la población del estado, casi 6 millones de habitantes, distribuida en más de 150 barrios

Estado de San Pablo

Un estado que se utilizó durante más de 3 siglos e inclusive en el inicio del periodo colonial como almacén comercial. Su rápido desarrollo llegó después con las plantaciones de café, a mediados del siglo XIX, que se extendieron por todo  y toda una infraestructura de apoyo que, en pocas décadas, llevó a la región a asumir un papel predominante en el economía del país.

Es una tierra de mezcla de razas, ya que los inmigrantes que llegaron fueron de más de 50 países, que se mezclaron entre ellos, con los indígenas y con los esclavos africanos. Los inmigrantes acudieron en busca de trabajo, y el café era el producto más demandado.

São Paulo tiene poco más de 34 millones de habitantes, lo que corresponde a casi el 22% de la población de Brasil. Con cerca del 35% del PIB nacional, tiene uno de los mayores PIBs de América Latina y es un centro económico de gran importancia, está situado el mayor parque industrial del país y también la sede del capital financiero. En São Paulo, a 70 Kms de la capital, está el Puerto de Santos el mayor puerto de América Latina, y por consiguiente un gran centro de recepción y distribución de mercancías a nivel mundial.

El Estado tiene 625 municipios, 39 de los cuales forman la Región Metropolitana de São Paulo, el tercer mayor conglomerado urbano del planeta, con 16 millones de habitantes. La RMSP alberga a muchas de las mayores empresas nacionales e internacionales y de los bancos extranjeros con sede en el país.

São Paulo, fundada en 1554 por padres jesuitas, la entonces pequeña villa de São Paulo siguió siendo tranquila hasta mediados del siglo XIX, momento en que comenzó a desarrollarse con el cultivo del café. De ahí en adelante, las oportunidades pasaron a estar en todas partes y la capital del Estado de São Paulo ya nunca ha dejado de crecer. Ha recibido a inmigrantes de todo el mundo para paliar la escasez de mano de obra existente entonces y hoy se puede estimar que es la tercera mayor ciudad italiana del mundo, la mayor ciudad japonesa fuera de Japón, la tercera mayor ciudad libanesa fuera de Líbano, la mayor ciudad portuguesa fuera de Portugal y la mayor ciudad española fuera de España.

Sao Paulo, es el principal polo económico y tiene la mayor concentración urbana del país. Con una infraestructura económica montada a lo largo del último siglo y medio, la ciudad tiene una industria integrada, una red de servicios conectada con los principales centros mundiales y amplios servicios de información, ocio y cultura. Su tendencia ha venido siendo la de consolidar su vocación como una gran y moderna metrópolis orientada a la prestación de servicios apoyados en las tecnologías más avanzadas.

Estado de Minas Gerais

Es uno de los mayores estados brasileños, con un variadísimo relieve y vegetación, conserva en sus valles y montañas ciudades histórico-barrocas, tiene aguas terapéuticas que brotan de su suelo rico en minerales; con sus balnearios hidrominerales y termales, forman el “Circuito das aguas” recorrido ideal para los meses de junio y julio, en invierno en Brasil.

La ocupación del territorio de Minas por los portugueses se inició inmediatamente después del descubrimiento de Brasil, en los siglos XVI y XVII. El descubrimiento de oro y piedras preciosas atrajo a muchos exploradores, que transformaron el estado en el centro económico brasileño de la época.

Desde la época colonial, Minas destaca en el país por su cultura. música, arquitectura, literatura y artes plásticas son algunos de los sectores cultivados con éxito por los artistas del estado. En las ciudades del circuito del oro, donde floreció la música minera del siglo XVIII, las construcciones de los siglos XVII y XVIII se conservan y expresan el arte del barroco mineiro. La más famosa de estas ciudades, Ouro Preto fue escenario de la Inconfidência Mineira, primer movimiento a favor de la independencia de Brasil y hoy, junto con Diamantina y el Santuario del Buen Jesús de Matosinhos, en Congonhas do Campo, está reconocida por la UNESCO como Patrimonios de la Humanidad.

Las tierras de Minas nos ofrecen también las aguas del río São Francisco, recurso hídrico estratégico para el desarrollo regional.

Minas ocupa 588.000 km2 del territorio brasileño, extensión superior a la de países como Francia (544.000 km2) o de Japón (378.000 km2). A pesar de ser el mayor productor nacional de café y leche, el sector agropecuario representa tan sólo el 14,1% de su PIB. El sector industrial, con un parque amplio y variado, responde actualmente del 26,3% de la producción del estado, la minería y la metalurgia están entre las principales actividades del sector, junto a la automovilística. El 59,9% restante del PIB está dividido entre servicios, comercio y establecimientos financieros, entre otros.

Belo Horizonte, creada para sustituir a Ouro Preto como capital del estado de Minas Gerais, Belo Horizonte es una de las pocas ciudades brasileñas planificadas. Situada a una altitud de 858 m., su construcción se inicio en 1893 y cuatro años después era inaugurada con el nombre de Cidade de Minas. Al planificarla, los ingenieros Aarão Reis y Francisco Bicalho se inspiraron en el plan urbanístico de Washington DC (EE.UU.).
Belo Horizonte es la cuarta ciudad del país en población. Su región metropolitana está formada por 20 municipios.

El estado es el tercer productor de café del país, el mayor productor y exportador brasileño de papaya, producción textil de lino que se sitúa en el primer productor a nivel mundial, celulosa, etc.

Estado de Espiritu Santo

Ocupando una franja estrecha y larga entre el mar y la montaña, Espírito Santo tiene un gran potencial turístico, con playas para todos los gustos, construcciones antiguas y marcos históricos de la colonización. Su capital, Vitória, fundada en 1551, es una isla y la segunda ciudad más antigua del estado. La primera es Vila Velha, fundada en 1534 por el portugués Vasco Fernandes. La resistencia de los indios goitacases obligó a los colonizadores a mudarse de Ilha Velha (la isla de enfrente). En la disputa con los indios por la posesión de la tierra, triunfaron los portugueses que dieron al nuevo poblado el nombre de Vitória. Las dos ciudades prosperaron y actualmente viven en armonía, separadas por un puente de 4,8 kms Recortada por ensenadas, Vitória tiene cinco playas y es la mayor isla de un archipiélago de 33 islotes.

. Esta formada por los Estados de Paraná, Santa Catarina y Río Grande do Sul, tiene un clima subtropical, excepto en la región norte del Estado de Paraná, donde predomina el clima tropical, aunque existe una diversidad de temperaturas en las diferentes áreas que la forman. Las regiones de mesetas más elevadas tienen temperaturas bajas, con nevadas ocasionales, y la región de la planicie de la Pampa, más hacia el sur, tiene temperaturas más elevadas. La vegetación se encuentra de acorde a esas variaciones de temperaturas, tal es así que en los lugares más fríos predominan las zonas de araucarias (especie de pinos) y en la pampa, los campos de gramíneas.

La población supera los 25 millones de habitantes, con una expectativa de vida de 69 años, la mayor de Brasil. La densidad demográfica es de 41 habitantes por km2 y el 75 % de la población vive en el medio urbano. En esta región se encuentran rasgos muy marcados de la influencia de la inmigración europea principalmente de Alemania, Italia y Polonia.

Estado de Río Grande

Entre los años 1835 y 1845 el estado fue escenario de la Revolução Farroupilha, de ideas separatistas, que unió a los liberales republicanos contra el gobierno imperial, más tarde se produjo otra revuelta la llamada: Revolución Federalista, entre dos facciones políticas, por un lado, el Partido Republicano; por otro, los liberales y parlamentaristas, aunque este conflicto duró menos de dos años, pero dejó secuelas que dieron lugar a otra revolución, la de 1923. La pacificación del estado sólo tendría lugar a partir de 1928, durante el gobierno de Getúlio Vargas, más tarde presidente de Brasil.
En medio de los conflictos, empezaron a llegar olas de inmigrantes a Rio Grande do Sul. Primero fueron los alemanes después los italianos, esta situación provocó que la economía se diversificara, y no lo se basara en la producción de ganado para carne, sino en producciones puramente agrícolas.
La agricultura gaúcha está basada en pequeñas propiedades rurales, llevando al estado a ser conocido como el granero del país, aportando el 25% de la producción brasileña de grano, principalmente soja, trigo, arroz y maíz. Rio Grande do Sul es hoy el estado brasileño con mejor Índice de Desarrollo Humano, de acuerdo con indicadores de renta per capita, escolaridad y expectativa de vida al nacer.

El estado tiene también una producción ganadera muy importante en cantidad y calidad, su carne de vacuno con la cual los gaúchos preparan uno de los mejores churrascos del mundo es reconocida tanto en el país como en el extranjero. De la ganadería se derivan también las industrias de cuero y calzado, que, junto a la industria metal mecánica, química y petroquímica, son las más significativas del estado.

Porto Alegre, Fundada en 1777 por los portugueses procedentes de las islas Azores, capital del estado, y situada lejos del océano lo que le ha perjudicado durante muchos años, aunque a  partir del siglo XIX, con la colonización alemana y la construcción de los primeros ferrocarriles, la ciudad comenzó a crecer a un ritmo acelerado, hasta convertirse en la ciudad más importante del sur del país. Precisamente es su situación estratégica actualmente le permite ser un lugar clave en las relaciones con el MERCOSUR.

Estado de Santa Catarina

Conocido como un trozo de Europa enclavado en el sur de Brasil, Santa Catarina tiene uno de los mayores índices de desarrollo económico del país, basado en una producción industrial diversificada, en la agropecuaria y en la extracción de minerales.

Con un territorio del tamaño de Portugal y una población semejante a la de Noruega, el estado de Santa Catarina está repleto de contrastes: en la naturaleza, las sierras se contraponen al litoral salpicado de playas, bahías, ensenadas y decenas de islas; en la arquitectura, ciudades como Blumenau y Joinville mantienen las construcciones típicas de la época en que los inmigrantes, principalmente alemanes, colonizaron el estado, mientras la capital, Florianópolis, es una ciudad moderna

La ruta de la colonización comenzó por el litoral, con la llegada de los portugueses de las islas Azores, a mediados del siglo XVIII, enviados por la Corona portuguesa para consolidar la posesión de la isla. Después de ellos vinieron los italianos, que se establecieron principalmente en el sur y en el oeste del estado, y, finalmente, los alemanes, que se asentaron al norte y al nordeste, en ciudades como Blumenau, en el Vale do Itajaí y Joinville.

Conocer Santa Catarina es conocer esta mezcla de nacionalidades, que se refleja en la cultura y en el patrimonio histórico del estado. Sin embargo, los 35°C en verano y las playas lindísimas, junto a temperaturas que llegan a provocar nieve en invierno, en el planalto serrano, son uno de los principales atractivos para los turistas que a lo largo de todo el año visitan el estado.

Florianópolis, bañada por 42 playas, Florianópolis es un regalo de la naturaleza. Situada en la Isla de Santa Catarina, la capital del estado de Santa Catarina completa su paisaje con lagunas, dunas y pequeñas islas que se extienden por todo su litoral. Las magnificas olas de playas como Joaquina, hacen que la ciudad sea escenario ideal para la práctica del surf. Playas con infraestructura de hoteles y restaurantes al más alto nivel, como Canasvieiras y Jururé dividen su belleza con playas rústicas, como Campeche, Ponta dos Naufragados y Solidão.

Estado de Paraná

Paraná está situado en el centro de la región más industrializada de América Latina: en un radio de 1400 kms están situados los mayores centros económicos del país y las capitales de Uruguay, Argentina y Paraguay. Ocupando un punto estratégico en el mapa brasileño, el Estado abrió sus puertas al MERCOSUR y su mercado de casi 200 millones de habitantes. Para ello, ha realizado grandes inversiones en la agroindustria.
La integración económica y social de Paraná está siendo perfeccionada mediante la modernización y ampliación de una bien estructurada red de comunicaciones.

Curitiba, es la capital del Estado de Paraná, es la más ecológica de Brasil y probablemente a la que se le han aplicado las soluciones urbanísticas más innovadoras del mundo. El sistema de transporte ha servido de modelo para otras grandes ciudades del mundo. La zona verde, 52 m2 por habitante, es bastante superior al mínimo de 16 m2 por habitante recomendados por la ONU. Calles peatonales, calles con tiendas abiertas las 24 horas del día, preservación del patrimonio arquitectónico, recogida selectiva de residuos urbanos, todo ello se ha venido desarrollando en Curitiba teniendo como objetivo el bienestar de la población.

Curitiba nació a la sombra de las araucarias (especie de pino) hace poco más de 300 años, su nombre nos indica su herencia indígena: kur ity ba, como los indios identificaban a los piñones, frutos de la araucaria árbol emblemático de Paraná. La ciudad surgió cuando los exploradores de oro, procedentes del litoral, subieron los ríos hasta la Serra do Mar, alcanzando la Meseta. El primer núcleo se estableció a orillas del río Atuba, en la localidad llamada Vilinha. En 1842 la villa ascendió a la categoría de ciudad con el nombre de Curitiba y, en 1853, fue elevada a capital del Estado.

También con gran potencial turistico, sus bellezas naturales la configuran como una de las regiones de mayor interés del país, ocupa el 18,86% del territorio brasileño, con una extensión de 1.612.052 km2 y está formada por los Estados de Goiás, Mato Grosso do Sul, Mato Grosso y el Distrito Federal. Situada en el extenso Planalto Central (meseta central), su relieve se caracteriza por el predominio de terrenos antiguos y allanados por la erosión, que dieron origen a los chapadões (planicies de vegetación rasa sin árboles). En la parte oeste del Estado de Mato Grosso do Sul y suroeste del Estado de Mato Grosso se encuentra la depresión del Pantanal Matogrossense, surcada por el río Paraguay y sujeta a inundaciones durante parte del año.

La vegetación del Pantanal es extremadamente variada y su fauna de una riqueza extraordinaria, es un lugar ideal para realizar un “Safari fotográfico”. En la región del Planalto predomina la vegetación de cerrado. El clima de la región es tropical y semihúmedo, con frecuentes lluvias en verano.

La población es de aproximadamente de 11.500.000 habitantes, con una densidad demográfica de 6,51 habitantes por km2. La mayoría el 81,35 % de los habitantes se concentran en la zona urbana. La expectativa de vida en esta región es de 68 años.

La economía se basó, inicialmente, en la explotación de minas de oro y diamantes y fue, gradualmente, siendo sustituida por la ganadería. El traslado de la capital federal de Río de Janeiro a Brasilia, en 1960, y la construcción de vías férreas que facilitaron el acceso en dirección al oeste, esta situación a acelerado el crecimiento demografico de la región, contribuyendo a su desarrollo.

 El turismo y el ecoturismo como actividad económica se han desarrollado rápidamente en la región, atrayendo a visitantes de diversas partes del mundo, que procuran disfrutar de la riqueza de la flora y la fauna del Pantanal, así como del paisaje de las chapadas encontradas en los Estados de Goiás y Mato Grosso.

Estado de Matto Grosso

Situado en el centro-oeste de Brasil, el estado de Mato Grosso fue el destino de algunas de las más importantes expediciones que partieron de São Paulo durante el siglo XVIII para poblar el interior del país, crear negocios y encontrar yacimientos de oro y piedras preciosas. La capital del estado, Cuiabá es el un punto de llegada y de salida de uno de los estados brasileños más atrayentes por su situación y recursos.

Habitado por más de 15.000 indios es el estado con la quinta población nativa más importante  de Brasil.

Aunque ya no existan en Mato Grosso yacimientos minerales con el mismo potencial que los que atrajeron a los colonizadores que acudieron en el siglo XVIII, el Mato Grosso cuenta con una producción de oro estimada en más 14.000 kgs. anuales, destacándose, con los estados de Pará y de Rondônia, en la explotación de este mineral.
En 1977, el estado se dividió en dos, dando origen, en su porción sur, al estado de Mato Grosso do Sul.
Además de la actividad minera, basa su economía en la actividad forestal (madera y carbón vegetal), en la cría de ganado (ganado de engorde) y en la agricultura.

En Mato Grosso se encuentran dos de las zonas de naturaleza más interesantes de Brasil: la Chapada dos Guimarães y el Pantanal, el primero forma un escenario único formado por montañas de arenisca que parecen recortadas, recordando, en sus formas, una ciudad de piedras, con barrancos, cañones y cascadas fantásticas; el segundo, la mayor región inundable del mundo, donde la sucesión entre las épocas de crecidas y disminución de las aguas de los ríos da origen a una cadena alimentaria sin igual, poblando la región con una fauna especialmente rica y variada.

Cuiabá, la capital del estado de Mato Grosso es una ciudad con abundantes zonas verdes donde se mezclan rasgos de un pasado colonial con huellas de un lugar que creció, se desarrolló mucho en las últimas décadas y que, con su universidad ha sufrido una importante transformación. Atravesada por el río Cuiabá, la ciudad fue destino de exploradores y aventureros que en los siglos XVIII y XIX.

Distrito Federal

Situado en el corazón del país, el estado fue fundado a principios del siglo XVII por bandeirantes, que llegaron a sus tierras en busca de oro, metal que se encontraba en abundancia en este estado.

Actualmente en Goiás la cria de ganado en la principal fuente de recursos, seguida de la producción industrial y del comercio.

Su capital, Goiânia, especialmente proyectada para funcionar como centro político y económico del estado.

En su territorio se construyó Brasília, la capital del país, inaugurada en 1960, lo que provocó unas mejores comunicaciones con el centro de Brasil y por consiguiente repercutió también en una mejora de las comunicaciones en Goiás. En 1988, cerca del 40% de la zona norte del territorio de Goiás fue desmembrado, dando origen al Estado de Tocantins.

En un principio se pensaba que Brasilia dejaria de ser la capital del país con la llegada al poder de lo militares en la década de 1960, principalmente por el hecho de que quienes habian sido los protagonistas de la construcción de Brasilia eran de tendencia comunista, pero no fue así prevalecieron otras razones practicas y de desarrollo de la economia, y la ciudad se seguió manteniendo como capital del país hasta nuestros días.

Proyectada inicialmente para acoger alrededor de 500.000 habitantes, la ciudad cuenta actualmente con más de 600.000 en el área proyectada inicial y más de 1.400.000 en todo el extrarradio, lo que representa algo más de 2 millones de habitantes, que conviven democráticamente, políticos de diversas tendencias, diplomáticos de los más distantes países, funcionarios públicos de todos los escalones, etc.

Brasilia comparte con ciudades como San Petersburgo, Washington, DC, Canberra o Putrajaya, la particularidad de haber sido construida de la nada, convirtiéndose directamente en una gran ciudad.

Situada en la región Centro-Oeste, en una extensión cedida por el Estado de Goiás, Brasilia está bordeada por los ríos Preto, al este, y Descoberto, al oeste.

La capital brasileña es la más conocida entre las ciudades planeadas en este siglo y es un modelo del urbanismo contemporáneo y de la arquitectura moderna.

Brasilia concentra el mayor número de obras de arte por metro cuadrado de los más conocidos artistas brasileños.

El nuevo Distrito Federal atrajo a miles de trabajadores de todas las regiones del país, los llamados "candangos", responsables de la construcción de la ciudad. 27 años después de su fundación, el esfuerzo de todos los que colaboraron en esta obra obtuvo su reconocimiento por  la UNESCO declarando en 1987 a Brasilia como Patrimonio Cultural de la Humanidad.